Sobre los talleres en línea


Es una lástima que a pesar de que actualmente tenemos acceso a medios de comunicación como antes nunca habríamos soñado no hagamos uso de ellos, en particular en lo que respecta a la educación. ¿Te imaginas poder estar sentado en el café de tu preferencia, con tu iPad o tu computadora portátil sobre la mesa, y tomar un taller que se imparte en Guadalajara cuando tú vives en, digamos, Mérida? Y si puedes imaginar semejante comodidad, ¿lo has intentado?

En otros países, cuando alguien no desea o no puede trasladarse al lugar donde se imparte una clase que le interesa, recurre a la educación en línea. En México estamos lejos de aprovechar tan genial forma de aprender.

Debo reconocer, no obstante, que hay una razón detrás de esto: hay muchos charlatanes que ofrecen educación en línea y no cumplen. Pero, ¿qué es la educación en línea? ¿Es lo mismo que educación a distancia? No.

La educación en línea, como tal, es una clase como cualquiera otra, en vivo, en tiempo real, ya sea en grupo o de manera individual, donde el alumno tiene una interacción directa con el instructor y puede hacer preguntas y resolver dudas al momento. Generalmente, se establece un horario fijo para las clases, que se realizan a través de sistemas de comunicación bilateral, tanto de audio como de video.

La educación a distancia, por otra parte, es aquella en que el participante recibe material que de estudiar por su cuenta para luego comunicarse con un tutor que revisa y evalúa su avance. Y he aquí el truco: muchas instituciones e individuos ofrecen educación en línea, pero lo único que ponen a disposición de los estudiantes es una serie de vídeos (conocidos actualmente como “tutoriales”) para que el alumno “aprenda” por su cuenta. Por eso hay confusión entre un sistema y el otro.

La educación a distancia no debe ser distinta de la educación tradicional, presencial, excepto porque cada participante podría encontrarse en un lugar distinto del planeta. Este sistema no es nuevo, pero el acceso a él, sí. En realidad, se implantó hace alrededor de 20 años a través de lo que entonces se conocía como “aulas virtuales”, que, por cierto, sólo existían en las universidades más caras del país. Un instructor se plantaba delante de un micrófono y una cámara que lo mismo lo mostraba a él que al pizarrón que usaba para hacer apuntes sobre el tema en cuestión. Los alumnos, en ese tiempo concentrados en una o varias aulas especiales que contaban con proyector y sistema de audio, “presenciaban” la clase desde donde estuvieran. Si alguno tenía una pregunta, hacía una seña a un moderador para que éste, a su vez, enviara la señal al instructor. Entonces, se activaba un micrófono en el aula virtual para que el alumno hiciera la pregunta, que era escuchada por todos los demás participantes, al igual que la respuesta que luego brindaba el instructor. En ese tiempo, los participantes no podían verse unos a otros ni podían interactuar entre sí.

Actualmente, las cosas han cambiado mucho. Hoy es posible sostener video-conferencias con y entre varias personas a través de Skype o Google+ y, cuando se trata de grupos numerosos, a través de software especial para seminarios en línea o “webinars”. Con cualidades más o cualidades menos, estas aplicaciones han abierto una posibilidad maravillosa para que cualquier persona, sin tener que salir de la comodidad de su casa u oficina, adquiera los conocimientos que desea o necesita. Obviamente, es imprescindible que quien ofrezca clases en línea cuente con programas académicos diseñados especialmente para este fin así como con el equipo apropiado tanto para la producción como para la transmisión.

Pero lo más importante es que la gente que desea aprender se dé la oportunidad de probar los sistemas en línea. Claro que hay que buscar con cuidado, pero las opciones existen. He recibido mensajes de correo de personas que viven en lugares donde Iconofilia no tiene talleres programados aún y que nos piden que llevemos uno a su ciudad. ¿No sería mucho más sencillo sólo conectarse a la Internet? También así se puede.

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